¿Qué es un PMV y cómo implementarlo?

¿Quieres saber qué es un PMV y cómo implementarlo? En este artículo te contaremos todo lo que necesitas saber sobre el Producto Mínimo Viable; la mejor forma de comprobar las hipótesis sobre tu proyecto y la cabida que tendrá tu emprendimiento en el mercado. ¡Toma nota!

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¿Qué es un PMV?

Ya has decidido todas las funcionalidades que va a tener tu producto o servicio, sin embargo, ¿estás seguro de que el cliente necesitará todas ellas y las apreciará? Para no perder el tiempo y el dinero es importante que crees una primera versión de tu propuesta y así puedas comprobar sus funcionalidades y la acogida que tendrá entre tus clientes potenciales.

Para ello, deberás crear un Producto Mínimo Viable, es decir, la versión mínima del producto que necesitas para que empiecen a comprarlo.

El PMV es uno de los conceptos básicos del Lean Startup, es la mejor forma de adaptar un nuevo producto al mercado y los clientes. Podríamos definirlo como una versión de un nuevo producto que cuenta con las características necesarias para lograr un objetivo específico y por el que los clientes estén dispuestos a pagar de alguna forma.

Características del Mínimo Producto Viable

El Producto Mínimo Viable suele cumplir algunas característucas:

• Rápido y barato: es el producto más rápido y barato que puedas construir
• Accesible: puedes hacerlo llegar a tus clientes fácilmente en poco tiempo.
• Útil: te permite hacer que tus clientes necesiten tus productos o servicios y lo deseen.

Para entender qué es un PMV podríamos definirlo como experimento que te ayude a validar una hipótesis de negocio como podría ser “nuestro producto despierta interés en los consumidores”.

El PMV es crucial para gestionar tu tiempo de forma productiva. Después de meses trabajando, podrás adquirir el primer feedback real (positivo o negativo), hasta entonces has ido trabajando por intuición, un proyecto en papel. Hasta que no lo lances no existirá.

Sin embargo, no debes confundir PMV con prototipo, a veces sucede que cuesta distinguir ambos conceptos, especialmente debido a las posibilidades que nos ofrecen nuevas tecnologías como las impresoras 3D. Las funciones de un prototipo y de un PMV son completamente distintas, mientras que un prototipo es una representación visual o real del producto que deseas lanzar, el PMV lo que busca es la interacción con early adopters para aprender de su feedback. Para crear los productos que el cliente quiere comprar es imprescindible conocer cómo ha cambiado el sector tradicional.

Pasos para desarrollar tu PMV

#1 Identifica tu cliente

El primer paso que debes seguir para desarrollar tu PMV es identificar cuál es tu target, cuál es el perfil de tu cliente potencial, de tu cliente ideal. Define sus rasgos demográficos, geográficos, qué buscan, etc.

#2 Estudio de campo

Debes salir a la calle, comprobar en primera persona si el público al que quieres dirigirte se encuentra ahí realmente y no solo en tu imaginación.

#3 Identifica a tu competencia

Sal de tu oficina y prueba tú mismo los productos y servicios de la competencia, tanto de tus competidores directos como de posibles productos sustitutivos. Comprueba sus precios, su propuesta de valor, sus canales, etc.

#4 Construye tu Producto Mínimo Viable

Partiendo de los datos que has obtenido crea tu primera versión del producto.

#5 Regresa a tus clientes

Con tu propuesta en las manos, regresa a tus clientes y pregúntales si estarían dispuestos a pagar cierta cantidad por aquello que tú ofreces con tu PMV.

# 6 Invita a probar tu PMV

Así podrás comprobar tu hipótesis con lo que el cliente dice, no solo con lo que hace.

7 Formas de implementar tu PMV

Tu  MVP depende del tipo de producto y en función de eso variará su complejidad. Una vez determinada a hipótesis que quieres probar te recomendamos que utilices algunas de estas técnicas para poder obtener resultados y datos fiables de tus clientes.

Landing Page

La primera web que tus clientes potenciales visitarán, por eso representan una gran oportunidad para ti. En la página de aterrizaje puedes explicar las singularidades de tu producto haciendo que los usuarios que acedan a ella se inscriban. Este PMV te permite comprobar que tu producto tiene cabida en el mundo real. Es importante incluir en tu Landing Page una propuesta de valor eficaz, así como un Call to Action efectivo y llamativo. Como lo que te interesa es aprender, debes medir tus resultados con herramientas como Google Analytics o KISSmetrics.

Campañas publicitarias

Puede sonar extraño, pero los anuncios son un método muy efectivo para hacer encuestas de validación de mercado, especialmente en Google y Facebook, plataformas donde podrás hacer hincapié en la segmentación de tus clientes potenciales. Esto te permitirá comprobar cuáles son las funcionalidades y las características que son más valoradas y resultan más atractivas para tu público. Estas campañas te permiten acceder a estadísticas como el Ratio de Clics (CTR) o las conversiones.

Crowdfunding

Las campañas de Crowdfunding se convierten en una gran oportunidad para realizar pruebas de tu PMV ya que estas plataformas, en el fondo, podrían considerarse colecciones de Productos Mínimos Viables donde podemos estudiar la cabida que tienen los productos finales en el mercado a partir de las contribuciones a la campaña. Esta estrategia te ofrece diversas ventajas: por un lado, aprendes validando el desarrollo de tu producto teniendo acceso a un primer grupo realmente implicado en tu proyecto y, por otro, adquieres financiación para llevarlo a cabo. Incluye en tu campaña un Storytelling, vídeos explicativos, incentivos para las personas que te apoyan, etc.

Vídeo explicativo

Puedes intentar explicar tu producto con todo lujo de detalles, sin embargo, nada comunica más que un vídeo en el que se pueda ver la experiencia del usuario con tu producto. El vídeo explicativo debe explicar qué hace tu producto y por qué la gente debería comprarlo. Menos es más, con 90 segundos es suficiente.

Técnica Mago de Oz

Esta técnica consiste en desarrollar únicamente la parte más sencilla de tu plataforma, por tanto, a coste reducido y de forma manual. Los usuarios pensarán que estás llevando a cabo pruebas con el producto final, a pesar de que se tratará de un trabajo manual. Esta técnica te aportará numerosas ventajas en cuanto al estudio, pues tendrás una mayor interacción con tus clientes y podrás observar en primera persona la información recibida. Al ser manual, también te permite más agilidad en los cambios ya que, a partir de la observación, puedes probar diferentes cosas sobre la marcha y estudiar las reacciones de los clientes. La técnica del Mago de Oz requiere mucho esfuerzo pero desde luego merece la pena por la información que te aportan.

Test A/B

Este test te permite comprobar la efectividad de cualquier cambio que apliques tanto en tu producto como en tus acciones de marketing. Consiste en probar dos versiones de una misma acción de marketing o de una misma página y determinar cuál es la mejor a partir de las reacciones de los distintos visitantes. Es decir, una parte de los usuarios verán la versión A, mientras que el resto verán la versión B para finalmente averiguar cuál ha tenido más éxito con mediciones como el porcentaje de abandonos o las conversiones.

Técnica Concierge

El funcionamiento de esta técnica es parecido a la de Mago de Oz, pero en este caso no se finge que todo funciona de forma automática, sino que se especifica en todo momento que todo se hace de forma manual, haciendo énfasis en el tratamiento completamente personalizado de los clientes seleccionados. Estas pruebas te aseguran que estás construyendo algo que los clientes van a utilizar y pagar.

Ejemplos de buenos PMV

Zappos

El fundador de esta plataforma de venta online de zapatos empezó utilizando la técnica del Mago de Oz. Habló con el propietario de una zapatería local y subió unas fotos de sus zapatos a su web para medir la demanda que había. Cuando se realizaba un pedido iba él mismo a la tienda, compraba los zapatos, los empaquetaba y los enviaba manualmente al cliente. Finalmente pudo probar su hipótesis: “hay personas dispuestas a pagar por comprar zapatos online”. Zappos fue comprada por Amazon en 2009 por 1,2 billones de dólares.

Meal Planning

Una plataforma de food.com que se dedicada a ayudar a las familias a realizar su compra semanal basándose en los gustos y las ofertas de tiendas y supermercados cercanos. Esta organización utilizó la técnica de Concierge: empezaron teniendo un único cliente que pagaba 10$ a la semana, sin contar con ningún software, de modo que lo hacían todo manualmente con el único objetivo de obtener un feedback. No fue hasta que aumentaron los clientes que empezaron a invertir en la automatización de los procesos y en el aumento de personal.

¿Se te ocurren otras empresas que empezaran su actividad presentando un PMV? ¡Compártelas con nosotros!

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