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El mercado de valores mira a china

Tiempo de lectura: 6 min
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¿Qué pasa con el mercado de valores?

Hay que reconocer que los mercados han pasado por una fase de depresión. El causante de esta situación, el gigante asiático. Nos debemos de plantear si los mercados están nerviosos; y claramente viendo la situación de las semanas pasadas,  podemos comprobar que lo están. Ahora de plantearnos esto debemos saber por qué motivos están preocupados los mercados.

Las causas de la preocupación son por el impresionante desafío al que se enfrenta el gobierno de China, teniendo en cuenta su aparente incapacidad de luchar de forma adecuada con la explosión de su burbuja bursátil.

Se puede ver que los mercados de valores de todo el mundo han sufrido fuertes correcciones, empezando y con mayor intensidad la del gigante asiático. Entre los máximos registrados en el mes de junio y estos días, el índice de Shanghai había cedido un 43 por ciento. Sin embargo, el mercado de valores del gigante asiático sigue estando un 50 por ciento por encima de los valores alcanzados a principios del año pasado. La explosión de la segunda burbuja bursátil china en una década no parece haber concluido aunque se den un respiro.

Debemos tener en cuenta que el mercado de valores de China no es mercado considerado normal. Incluso de forma más acusada que en el resto de los mercados de valores, se trata de un casino en el que cada jugador espera encontrar una persona aún más ingenua a la que vender sus fichas más caras antes de que sea demasiado caro para ello.

¿Cuáles son los efectos secundarios por parte de China?

Un mercado de valores de estas características seguramente va a ser muy volátil. Por tanto, el desarrollo de los acontecimientos del mercado de valores del gigante asiático que se puede interpretar de dos maneras diferentes.

La primera es que las autoridades del gigante asiático decidieron arriesgar muchos recursos e incluso su gobierno en su intento fallido por detener el posible colapso de la burbuja bursátil. La otra es que el gobierno de China ha actuado seguramente movido por su inquietud por el crecimiento económico.

Si el gigante asiático está preocupado como para actuar de esta manera, el resto de países también se deberían de preocupar. Tampoco es la única vez en que el comportamiento del gobierno chino ha sido motivo de preocupación. Sólo tenemos que mirar las devaluaciones realizadas de su moneda, yuan, durante el mes de agosto. Esta medida tampoco debería tener mayor importancia, si se le considerara una devaluación acumulada frente el dólar estadounidense de apenas unos cuantos puntos porcentuales. No obstante, se debe tener en consideración que tiene consecuencias significantes.

El gobierno del gigante asiático quiete tener un margen para recortar sus tipos de interés, como ha puesto de manifiesto durante esta semana. Una vez más, este hecho pone de manifiesto la preocupación sobre la solidez de la economía China. Otra consecuencia que podemos tener en cuenta es que el gobierno chino intente reactivar el crecimiento con las  exportaciones.

En cualquier caso, es lógico tener preocupación por esta posibilidad y sus repercusiones. Por último, es que el gobierno de China se esté preparando ante las posibles fugas de capital. Si esto fuera así, Estados Unidos caería en su propia trampa, que la Reserva Federal ha luchado por lograr la liberalización del mercado de capitales del gigante asiático. Por tanto, tendría entonces que permitir una desestabilización a corto plazo por la devaluación del yuan.

Según los acontecimientos debemos interpretarlos dentro de un contexto más preocupante. Nos demos plantear si el gobierno chino puede pasar de una economía liberada por la inversión a una dominada por el consumo, mientras mantienen la demanda agregada. Si pasará el caso que se consiguiera, la economía también mantendría un crecimiento de entre el 6 y 7 por ciento. De lo contrario, existiría la constante amenaza de la inestabilidad económica y política.

Consecuencias futuras

La economía del gigante asiático ya se ha desacelerado. Al hablar de un nuevo escenario de normalidad se está reconociendo lo que pasa en su economía.  Según la consultora “Consensus Economics” pronostica un crecimiento alternativo según las medidas en las que existe un crecimiento de 5,3 por ciento durante el cuarto trimestre de este año.

Esta preocupación frente a una insuficiente demanda agregado no es nada nuevo. Ha sido una gran preocupación desde que comenzó la crisis financiera en occidente, que afectó de manera negativa a la demanda de las exportaciones del gigante asiático. Este motivo por qué el gigante asiático apostó por una masificación de inversiones impulsadas por el crédito. De manera sorprendente y a la vez preocupante, la proporción de la inversión en el Producto Interior Bruto (PIB) aumentó mientras, por el contrario, caía el crecimiento de la producción potencial. Esto no es una combinación muy sostenible a un largo plazo, lo que deja al gobierno chino con varios problemas pendientes a nivel económico.

  • La primera sería solucionar los excesos financieros de pasado mientras se evita una crisis a nivel financiero.
  • La segunda sería transformar la economía para ser más dependiente del consumo privado y público, y menos dependiente de los niveles de inversión que se pueden considerar muy altos.
  • La tercera sería lograr todos los objetivos a la vez que se mantenga el crecimiento dinámico de la demanda agregada.

Los recientes sucesos son importantes porque dan a entender que el gobierno chino aún no ha descubierto una manera de tener éxito en las consideraciones planteadas para lograr los objetivos. O, de una manera peor, que los recursos que han utilizado durante estos últimos años han empeorado la situación.

Nos tenemos que plantear si el mercado de valores ha entendido lo difícil que va a ser y, por lo tanto, se deben plantear que hasta qué punto pueden contribuir a desestabilizar la situación algunas de las opciones por las que pueden optar el gobierno chino. Entre estas se encuentra la devaluación del yuan, unos tipos de interés bajos e incluso la relajación a la que recurrido la Reserva Federal de Estados Unidos, el banco central del Reino Unido y el Banco Central Europeo en la zona euro. Si estos planteamientos se hicieran realidad, es probable que la reacción de los mercados de valores fuera desmedida. El exceso de ahorro global puede ir peor y esta tendencia acabaría por afectar a nivel globalizado.

Normalmente la mayoría de gente no tiene los conocimientos necesarios para entender el comportamiento de los mercados; pero para nada estamos diciendo que sea complejo, de hecho existe formación práctica y con casos reales en donde el mundo de las finanzas puede estar a la mano de todos.

2 comentarios en El mercado de valores mira a china

  1. Luis José Astorga Acevedo dice:

    Desde mi punto de vista la Economía China ha dado de sí todo lo que tenía que dar. Actuálmente su crecimiento es el más bajo desde 1999.El endurecimiento del sector financiero ha terminado de dinamitar a unas empresas que ya se encontraban muy endeudadas.

    Luis Astorga Acevedo , SW Trader

    1. Manuel Pérez Cardona dice:

      Hola Luis José, si que es cierto que a día de hoy la Economía China se ha ido desinflando o perdiendo poder, pero no descarto que siga más viva que nunca, ya que aún florece por sí sola y tiene muchas oportunidades que explotar aún. ¿Crees que la Economía China está muerta? Espero que te haya gustado el artículo y seguimos en contacto. Un saludo!

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