Llegamos al último post sobre la historia de Israel. A lo largo de los anteriores, estuvimos hablando, primero del cultivo – en el que vimos como habían conseguido crear el ambiente para que tantas empresas surgieran de esta forma – y de la idea – en el que hablamos sobre por qué lo hicieron y llevaron a cabo.
Sin embargo, hoy hablaremos de otra cosa: de cómo ejecutaron la idea. Esta, es la más importante porque realmente podemos – y debemos – aprender mucho de la forma de actuar de Israel. Podemos resumir esta manera de emprender, con tres adjetivos: compromiso – importancia – validez.
-Compromiso: no son un país demasiado grande. Entonces… ¿cómo pueden suplir esto? Lo hacen mediante el compromiso: compromiso de ser mejores día tras día y de cumplir con lo que acuerdan; compromiso en lo que a ser productivo respecta etc… El compromiso es esencial para comprender el funcionamiento de la sociedad empresarial israelí que es una de las mejores y más competentes del mundo. No hemos de extrañarnos entonces, cuando hacen progresos tan grandes y tan fuertes como los que nos muestran día a día.
-Importancia: según he podido leer, comprobar, estudiar y preguntar, la importancia de emprender en Israel es altísima. Muchos de los emprendedores allí, son idolatrados – y se lo merecen, por supuesto. Es muy necesario destacar esta importancia que tienen los emprendedores: mientras que en otros países son tachados de «locos» o de personas con poca visión de futuro, allí se les apoya, y se les apoya mucho.
-Validez: cuando hablamos de validez, nos referimos a varias cosas. La primera, es la validez de las cosas que hacen y su forma de hacerlas. La segunda, es la validez de su comportamiento: a pesar de no ser como el de otros países que han demostrado que es plenamente efectivo.
La critica debería de ser como la piedra de afilar, que aguza sin cortar – Proverbio israelí
Hola Jaime,
estoy muy de acuerdo en tomar la actitud emprendedora israelí como ejemplo. He estado en Israel una docena de veces en los últimos 10 años, y siempre me genera respeto y admiración la ambición empresarial que se respira en el pais. Allí nadie quiere ser funcionario o mantener un mismo trabajo durante 10 años. El sueño es abrir un negocio q tenga éxito y crezca para generar beneficios y empleo. Están dispuestos a descubrir oportunidades, se centran en el desarrollo y la innovación, y tienen un excelente nivel de servicio. Una combinación del empuje americano y el estilo mediterráneo. Nada q nosotros no podamos imitar!
un abrazo,
Isabel