Eva Rodriguez Alvarez 
La visibilidad es fundamental para que una empresa tenga éxito, tanto en empresas consolidadas como para emprendedores que comienzan un proyecto propio. ¿Para qué trazar un plan de acciones si nadie nos va a prestar atención? Esa es precisamente la labor de Isabel Ávila, emprendedora, miembro de Ellas 2.0 y fundadora de I am visibility, en la que ayuda a clientes a conseguir la visibilidad que necesitan. Mañana actúa como speaker en el MIT Global Startup Workshop, que se celebrará del 28 al 30 de marzo en Estambul. Junto con Felix Lozano, hablará sobre cómo generar ideas de negocio. Hoy hablamos con ella sobre su experiencia y cómo los emprendedores están cambiando el mundo.
Tu empresa se encarga de algo difícil de conseguir para un emprendedor: dar visibilidad. Cuéntanos un poco más cómo ayudáis a los emprendedores a que su proyecto sea conocido.
Les ayudamos a que sean más visibles gestionando su presencia en los medios de comunicación, las redes sociales y los blogs principalmente. Hoy en día, la prensa y los “influencers” de internet son tan influyentes que si no hablan de ti no existes.
Creo que la mayoría de los emprendedores y de sus proyectos tienen algo importante que decir a la sociedad, y ese aspecto “noticiable” que puede interesar a la opinión pública es el que hacemos llegar a los periodistas y líderes de opinión en internet. De esta forma, obtienen no sólo visibilidad para que potenciales inversores, trabajadores o clientes puedan encontrarles, sino credibilidad y una buena reputación. Hoy en día, ser visible y fácil de encontrar es ya una obligación para las empresas, ya sean grandes o pequeñas.
¿Cuáles son las habilidades fundamentales para un emprendedor? Es decir, aquellas sin las que crees que su proyecto no podría salir adelante.
Saber navegar en la incertidumbre, explorar nuevos territorios y tener esa habilidad innata de “buscarse la vida continuamente” con perseverancia, ilusión y optimismo. Quizá son más actitudes ante la vida de un emprendedor que habilidades, pero igual de necesarias. El resto creo que se puede aprender.
Para emprender un negocio propio hay que estar muy seguro de lo que haces. ¿Qué te impulso a montar tu empresa por cuenta propia?
Más que estar seguro diría que hay que tener confianza en uno mismo y muchas ganas de intentarlo sin miedo al fracaso. En mi caso, después de muchos años trabajando para medios de comunicación y gabinetes de prensa de empresas e instituciones públicas, me parecía un mayor reto y me hacía más ilusión empezar mi propia aventura profesional. Esto unido a que cada día los trabajos por cuenta ajena me parecen menos interesantes, menos seguros y peor remunerados en su mayoría.
Como dice Lynda Gratt, experta en tendencias del mercado laboral, el mundo que hemos conocido no regresará y los jóvenes deberán reinventar este mundo en sus aspectos laborales para realizarse con sus trabajos. Quien quiera un trabajo deberá en gran parte inventarlo a su medida. Así que eso hice yo, inventarme mi empresa, mi trabajo y mi futuro.
Ser su propio jefe tiene cosas buenas y malas, como trabajar fuera de horas o los fines de semana ¿Qué es lo que te impulsa a seguir adelante?
La libertad y el continuo aprendizaje. Ser el dueño de tu propio tiempo es lo mejor. Decidir en qué proyectos trabajar, desde qué lugar, cuántas horas al día dedicarle a tus actividades, no tener que pedirle permiso a nadie para tomar cualquier decisión, para descansar, para ir a determinadas reuniones, eventos, congresos, etc… También la oportunidad de explorar nuevos ámbitos profesionales y aprender en el camino, sentir que creces profesionalmente y que el límite sólo te lo pones tú, no otros.
Sabemos que estás muy conectada en el mundo emprendedor. Además de formar parte de Ellas 2.0, eres asidua de eventos de este ámbito. ¿Qué echas en falta a la hora de promocionar el papel de los emprendedores? ¿Se les da la suficiente importancia en España?
Por suerte cada día se le da más importancia al emprendedor, pero la verdad es que como está la sociedad casi no queda más remedio. O nos inventamos los trabajos o no hay trabajo, emprender hoy en día es casi una necesidad. Quizá en los próximos años los emprendedores seremos la mayoría y los trabajadores por cuenta ajena y los funcionarios una minoría, creo que la vida va por ahí.
En IEBS nos centramos en la formación para emprendedores. ¿Crees que hay la suficiente oferta formativa para personas que empiezan proyectos propios?
No sabría decirte si es lo que hay es suficiente o debería haber más, pero teniendo en cuenta que el futuro de las próximas generaciones viene por el emprendimiento el sistema educativo tendrá que incorporar nuevas materias, grados y títulos y nuevas formas de enseñanza adaptadas a los nuevos tiempos.
En mi caso, el mejor sistema de aprendizaje como emprendedora ha sido montar mi propia empresa. Haciéndolo estoy aprendiendo contabilidad, finanzas, a negociar con proveedores, todo lo que tiene que ver con el día a día de la empresa. Según he visto en universidades especializadas en formación de emprendedores de larga tradición como Team Academy Finlandia, la unidad de emprendizaje de la Universidad Politécnica de Jyväskylä (Finlandia), que lleva formando casi 20 años a emprendedores, se utiliza este instrumento de aprendizaje: los estudiantes montan su propia empresa y aprenden a través de ella.
Quizá una de las causas del fracaso de muchos proyectos sea que sus creadores no tienen los estudios necesarios o no reciben un asesoramiento correcto. A veces no nos damos cuenta de todo lo que implica una empresa…
Efectivamente, formarse y rodearse de buenos profesionales que te asesoren es fundamental.