Cómo y por qué emprender en Oriente Medio

Año nuevo, propuestas nuevas… ¿Y que tal si nos proponemos emprender en otro país? No se trata ya de escapar de la manida coyuntura económica que nos envuelve, sino de ir allá donde se encuentre la oportunidad. Por ello, dentro de nuestra serie especial mensual, cada miércoles de enero veremos los panoramas emprendedores de cuatro zonas geográficas para que nos podamos desenvolver en ellas detectando sus principales nichos de éxito, cómo se desenvuelven, ejemplos de éxito etc. el primero de ellos: emprender en Oriente Medio.

«Israel Valley»: la primera opción para emprender en Oriente Medio

¿Sabías que Israel es la llamada mundialmente como la Startup Nation? Los datos no son para menos: cada día en Israel se establecen dos nuevas startup, y hablamos de un país de tan sólo 7,1 millones de habitantes, sin apenas recursos naturales y con una importante inestabilidad política. ¿Cómo es posible que con estas características se convierta en un hervidero a la altura de Silicon Valley?

La receta como todo en materia económica, no es fruto del azar. Precisamente la falta de recursos, el moverse por la necesidad les hizo invertir en I+D, a lo que hay que sumar la férrea disciplina de los israelitas en materia de trabajo y economía, un fuerte apoyo de las instituciones en el desarrollo empresarial y medidas gubernamentales como potentes exenciones fiscales. Todo ello ha producido que Israel se convierta en el país con mayor densidad de Startups: una por cada 1.844 habitantes.

¿Quieren estos datos convencernos para que nos liemos la manta a la cabeza y vayamos a emprender a Israel? Si y no. Al ser caldo de cultivo, encontrarás allí muchas ideas válidas para comenzar tu negocio, pero también una alta competencia. Alta competencia idónea para establecer partners o importar sus sistemas de negocio.

Para rentabilizar la inversión: Amman

Cuando un modelo económico se convierte en éxito, es de inteligentes copiarlo e importarlo. A esta conclusión han llegado los hombres de negocio de la vecina Jordania, país de similares características. El gobierno de este país oriental ha invertido en infraestructura, educación y nuevas legislaciones, permitiéndole a Jordania tener una de las ciudades más baratas para emprender un negocio.

Este último hecho hace a Amman atractiva para, con los mismos medios que podríamos invertir en Israel, rentabilizarlo en un ecosistema similar a un coste menor: una especie de ley oferta/demanda a gran escala: entre ciudades.

Turquía a la espera de Europa

Mientras hablamos de lo interesante de importar el modelo israelí a occidente, en otros países sin una cultura de pensamiento más abierta a otras culturas o en proceso de hacerlo, (donde Turquía es un gran exponente), lo interesante es el proceso contrario: exportar las formas europeas. Pero cuidado: una máxima muy importante es la simbiosis cultural, ya que no se trata de imponer nuestro modelo, sino de adaptarlo.

Algunos países de influencia árabe, como el caso de la propia Turquía, no son receptivos a abandonar costumbres de su milenaria cultura, y en el caso de los negocios no es una excepción. Por ello, la negociación y la adaptación al entorno es clave, y sobre todo, que a la hora de llevar nuestra idea, se vea claramente que nos hemos preocupado en no sólo conocer, sino entender todas las bases culturales del país y mostrar un elevado respeto por ellas.

El Golfo Pérsico: otra liga

Al contrario de lo que se pueda pensar, a menos que te codees en ambientes económicos estratosféricos y por mucho que el dinero se mueva a mansalva por esta zona, los Emiratos, Qatar, Arabia Saudí… no son opciones atractivas a priori para un inversor medio y menos para una startup, por lo que sin la idea del millón de dólares mejor no contarlo como opción.

No obstante nunca se debe perder de vista ni los panoramas ni las oportunidades: estos países donde el «oro negro» ha convertido el desierto en megalópolis donde la ostentación es marca de la casa, están inmersos en una burbuja donde hay auténtica locura por los proyectos de gran envergadura y donde constantemente se requiere de gente experimentada que pueda establecer lazos entre países, al igual que tampoco hay que olvidar que en 2022 se celebrará la Copa Mundial de la FIFA en Qatar, y que cada vez que se organiza un evento de magnitud mundial, se establece un potente nicho de oportunidad para la inversión.

El Mediterráneo y el Golfo si, el resto de zonas a la espera

En definitiva de Oriente se puede concluir que es una zona muy atractica para startups y para mover grandes cantidades de dinero, donde una idea millonaria puede hacerse realidad si hablamos de los países del Golfo Pérsico, y donde un nuevo negocio tiene mucho apoyo y empuje en aquellos países cercanos a la costa mediterránea.

Por desgracia, del resto de países que conforman Oriente Medio, las continuas guerras y conflictos permanentes los convierten en zonas donde germinar una empresa es altamente complicado y menos para aquellos inversores que no conozcan a la perfección la zona , por lo que no es conveniente que entren en la agenda del emprendedor medio a menos hasta que llegue una reconstrucción democrática a estos países y una estabilidad… entonces ahí estará la oportunidad.

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