Cómo elegir dominio y hosting para tu web

Si estás pensando en empezar un negocio online, una de las primeras cosas que tienes que plantearte es qué dominio y hosting vas a utilizar. Estas cuestiones no solamente son importantes para la parte más técnica, sino que tienen mucho que ver con el éxito de tu empresa: Si tu página web pasa desapercibida en los buscadores, te costará mucho más salir a flote.

El Dominio: tu imagen en Internet

Tan importante es elegir un buen nombre para tu marca como elegir el dominio que tendrá en Internet. A continuación te sugerimos algunos consejos para que tu dominio represente de manera eficaz a tu empresa y la vez sea beneficioso para SEO:

1. Es importante que sea breve y fácil de escribir. Lo mejor es que las palabras que uses no sean ni difíciles ni excesivamente largas. Además, debes evitar los números y guiones porque llevan a confusión.

2. Decide si vas a usar solamente el nombre de tu marca o también palabras clave. Si bien la marca representa la identidad de un producto, muchos e-commerce usan palabras clave para describir su empresa y los servicios que ofrece. Si decides poner palabras clave, primero haz un análisis para saber qué palabras buscan los usuarios cuando necesitan los servicios que ofrece tu empresa. De esta forma, mejorarás tu posicionamiento SEO y el tráfico de la web.

3. Haz que te recuerden. Hay millones de nombres de dominio registrados, así que tener un dominio llamativo y acorde con tu empresa es esencial. Una vez lo tengas pensado, puedes pedirles a tus amigos que te den su opinión para asegurarte de que suena bien (recuerda que quienes te tienen que encontrar son los usuarios, así que no pienses sólo en algo que te guste a ti).

4. Comprueba que el dominio que has elegido esté disponible. Asegúrate de que el nombre que has elegido no exista, no tenga derechos de autor, y no lo esté usando otra empresa. Además, te aconsejamos que hagas una purga exhaustiva: Si ves que el nombre que quieres poner a tu dominio ya existe en .com, no intentes comprar el .es. ¡Siempre es mejor cambiar de nombre!

Uno de los aspectos más importantes a la hora de elegir un dominio, y que por tanto merece una atención especial, es pensar en la extensión. No todas las extensiones de dominio son iguales ni obtienen los mismos resultados a nivel de SEO:  Lo ideal sería utilizar siempre dominios genéricos como .com o .net, ya que no tienen ningún tipo de restricción territorial ni de actividad. La única pega es que , al no estar vinculados ni a un territorio ni a una actividad, Google los posicionará junto a todas las demás empresas del mundo, por lo que tendrás más competencia en posicionamiento.

Si por el contrario quieres poner una extensión con dominios territoriales como .es, .cat o .eus, debes cumplir una serie de requisitos. Para poder usarlos, debes desarrollar tu actividad en el territorio del dominio elegido o que la página web esté en una de las lenguas oficiales del territorio. Estas extensiones te favorecerán siempre y cuando tu negocio sea local: Los motores de búsqueda siempre tienen en cuenta la ubicación de la dirección IP desde donde se conectan los usuarios, y por lo tanto si tú te encuentras cerca saldrás en sus primeros resultados cuando la búsqueda se ajuste a tu web.

Si ya tienes un blog activo y quieres que el dominio sea tumarca.com en vez de aparecer como tumarca.wordpress.com, existen muchos tutoriales que te ayudarán a utilizar tu propio dominio en una página de WordPress.

El Hosting: un seguro para tu web

Para elegir el Hosting que funcionará mejor con tu web y la idea de negocio que tienes en mente, hay una serie de cuestiones que debes tener en cuenta:

• Objetivos. Debes saber cuál será la orientación de tu web (personal o profesional) y de qué tipo debería ser (estática o dinámica). Una web profesional siempre atraerá mucho más tráfico y necesitará de plugins y demás herramientas, mientras que la personal puede que no necesite una planificación demasiado compleja. En cuanto al tipo, debes tener en cuenta que una web estática está compuesta por una colección de páginas HTML muy simples con un contenido fijo, mientras que en una web dinámica el contenido cambia continuamente (como por ejemplo en foros de discusión, las wikis, los blogs como WordPress y las tiendas online con Prestashop o Magento).

• El tráfico que prevés para tu sitio web. Si de entrada ves que tu web tendrá un enorme tráfico, debes elegir un tipo de Hosting que pueda soportarlo sin que caiga el servidor.

• Espacio en el disco del servidor y la transferencia mensual. Hoy en día la mayoría de Hostings ofrecen un espacio «ilimitado», dando a entender que nunca vas a consumir el ancho de banda que te ofrecen.

• Disponibilidad. La cifra estándar es un 99% para asegurarte de que el servidor no se caiga.

• Velocidad de Carga de la web. Seguramente una de las cuestiones más importantes, ya que si tu web tarda demasiado en cargarse Google te penalizará en los resultados de búsqueda y además perderás tráfico. Piensa que los usuarios buscan webs usables dónde puedan encontrar lo que buscan en el menor tiempo posible.

• Soporte online para incidencias. Es muy probable que surjan problemas con el Hosting en algún momento puntual. Por ello, debes elegir un Hosting que ofrezca un buen servicio de atención al cliente las 24 horas del día, los 7 días de la semana.

• Buena infraestructura y reputación. Si tienes que decidirte entre un par de Hostings, puedes consultar sus referencias a través de Internet o preguntar a tus conocidos. Puede que la única forma que tengas para saber si un Hosting se corresponde con tus necesidades es preguntar a alguien que ya lo haya usado.

Una vez hayas elegido Hosting, si lo deseas puedes alojar una página de WordPress tal y como se explica en el siguiente tutorial. Ten en cuenta que este tipo de páginas son fáciles de utilizar, no requieren amplios conocimientos de programación y te permiten instalar una gran variedad de plugins.

Si eres nuevo en esto de crear páginas web, una de las cuestiones importantes que debes aprender es qué diferencia hay entre los diferentes tipos de Hosting. De forma resumida, los tipos de Hosting que existen son:

1. Hosting Compartido: Es la forma más barata y sencilla de hosting, y la más común. Si acabas de empezar es recomendable que te decantes por éste (ya que no suele haber caídas del servidor) y si más adelante necesitas un servicio más potente siempre puedes cambiarlo.

2. Servidor VPS: A diferencia del Hosting Compartido, con el Servidor VPS dispondrás de una cantidad de memoria y procesamiento asignados. Es mucho más estable que el alojamiento compartido y te permite tener más de una página en un mismo servidor. Es más profesional, y por lo tanto más cara que la anterior.

3. Servidor dedicado: Tendrás un servidor a tu disposición, lo que significa que es el Hosting más potente y el que garantiza más prestaciones. Con todo, es la forma más difícil de gestionar y además es el tipo de Hosting más caro.

4. Cloud Hosting: Distribuirás tu página web a través de una red de servidores, con lo cual no pagarás una cuota fija mensual sino que tu cuota dependerá del uso real que hagas de la red.

Una cuestión de SEO

Elegir un dominio y un hosting que se adapten a tus necesidades es fundamental para el posicionamiento en buscadores de tu página web. Además, como es la primera tarea que debes llevar a cabo, también te será útil para arrojar un poco de luz sobre el modelo de negocio que quieres emprender. Para saber más sobre SEO, te recomendamos que eches un vistazo al Máster en SEO y Posicionamiento Web en Buscadores de IEBS. Y si este artículo te ha resultado interesante, ¡No te olvides de compartir!