Es una de las frases del momento: “el Contenido es el rey”. Los últimos algoritmos de Google han dado mayor peso a la calidad de las publicaciones y las compañías han centrado sus estrategias de marketing en esta dirección. ¿Por qué? Principalmente porque han encontrado en el contenido una vía para conectar con sus clientes de una forma natural sin ser intrusivos.
En este contexto, las empresas optan por diversas estrategias que giran en torno a los contenidos. Es el caso del Content Marketing y el Branded Content. Seguramente estos términos te resulten más que familiares y, aunque tienen muchas similitudes, no son exactamente lo mismo. Antes de entrar en detalles, haremos una pequeña definición de cada estrategia:
- Branded Content. Conjunto de técnicas usadas por las marcas para conectar con el cliente ofreciendo contenidos creativos que le aporten valor tales como el entretenimiento o la educación. Como ya vimos en este artículo, suele decantarse por canales que ofrezcan contenido de gran consumo como blogs, redes sociales, películas, programas de televisión..
- Marketing de contenidos. Estrategia basada en la búsqueda, generación y distribución de contenidos no comerciales que resulten útiles y de calidad a los usuarios con el objetivo de atraer y retener tráfico cualificado con el objetivo de convertirlos en clientes rentables. No se trata de ofrecer contenidos sobre una marca sino que genere asociaciones positivas hacia una marca o compañía.
Vistas las definiciones, podemos comprobar que ambas técnicas apuestan por lo mismo: buenos contenidos, ajenos a la mera información corporativa de los productos y servicios de una empresa, para fidelizar con la comunidad de usuarios o clientes.
Índice de contenidos
¿Qué tienen en común el content marketing y el branded content?
Tal y como señala en su blog nuestra profesora del Postgrado en Inbound Marketing, Eva Sanagustín, tanto el branded content como el marketing de contenidos se asientan en cuatro bases:
- La clave: el contenido de calidad. Uno de los principales fallos que cometen las compañías en sus estrategias de marketing y comunicación es su afán por ofrecer sólo contenido directamente relacionado con su marca, productos y servicios. El contenido juega un papel decisivo para atraer a los clientes, apostando por informaciones relacionadas pero dejando a un lado el “ego” propio de una marca.
- No intrusión. Los clientes valorarán positivamente que nos dirijamos a ellos de una forma más indirecta. Crear contenidos de calidad permite que sean los usuarios los que nos encuentren cuando busquen una determinada información. De hecho, si les llega a resultar interesante recurrirán posteriormente a nosotros y será posible una fidelización. No les molesta nuestra presencia.
- Venta indirecta. Vinculado al punto anterior, las empresas dejan a un lado la venta directa de sus productos y servicios y sus constantes llamadas de atención para incentivar la compra.
- Uso de múltiples formatos. El Branded Content y el Marketing de Contenidos se decantan por ofrecer sus contenidos en diferentes formatos: desde vídeos a aplicaciones, pasando por los tradicionales artículos… entre otros.
¿Y sus diferencias?
Aunque la línea entre el Marketing de Contenidos y el Branded Content no queda muy clara, sí que se pueden observar pequeños matices entre uno y otro.
El branded content tiene un componente más lúdico, su objetivo es el entretenimiento y la promoción. Destaca por utilizar formatos audiovisuales. Generalmente, se le vincula con la publicidad. Un ejemplo podría ser el anuncio publicitario de la marca Campofrío con los mejores cómicos de España.
Así, el branded content representa una nueva forma de hacer comunicación de marca, donde es ésta la que genera contenidos multimedia en forma de entretenimiento para generar interés entre los clientes y que asocien una serie de valores a lo que transmiten.
Por su parte, el Marketing de Contenidos es más cercano al ámbito de la comunicación. No se queda en la mera creación de un contenido sino que es una estrategia mayor formada por diversas técnicas que van desde el content curator (búsqueda de informaciones relevantes) hasta la generación del contenido y su posterior distribución. Por tanto, cumple una función informativa. Un ejemplo lo encontramos en el portal de la compañía área Iberia, «Me gusta volar» donde se ofrecen informaciones sobre destinos, viajes y consejos.
¿Destacarías alguna diferencia más entre ambas? ¿Conoces casos de éxito? Si es así, no dudes en comentárnoslo. Para conocer más sobre Branded Content, echa un vistazo a nuestro postgrado y comprueba las ventajas que supone apostar por esta técnica. ¿Necesitas conectar con tus clientes? Todas las claves en el anterior enlace.
Artículo escrito por: Christian Pastrana
INTERESANTE Y DIDÁCTICO