Patricia Galiana Puede que más de una vez hayas oído el típico «hay que trabajar más horas» o «no descansaremos hasta que esto esté resuelto». La realidad es que, en la mayoría de casos, cualquier problema puede solucionarse si usamos nuestro ingenio y escuchamos lo que tengan que decir las personas que trabajan con nosotros. En este artículo hablaremos precisamente de cómo fomentar la creatividad en la empresa, algo que muchas veces dejamos de lado a pesar de que es la principal fuente de mejoras e innovación. ¡Descubre cómo desarrollar tu creatividad!
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¿Qué impide la creatividad en la empresa?
Existen 2 principales obstáculos que limitan la creatividad en una compañía: una barrera interna, a nivel de cada individuo, que limita la imaginación e inspiración; y otra barrera externa, que limita la expresión o la proyección de la creatividad dentro del entorno laboral. Si bien la barrera interna implica la mejora de las habilidades de cada trabajador, la barrea externa puede ser demolida por la empresa (siempre y cuando tenga la intención de hacerlo).
Algunas de las empresas más punteras del momento, como Google, destinan un 20% de las horas de trabajo de sus empleados para que estos piensen en nuevos proyectos. Se trata de darles a las personas un tiempo y un espacio para que piensen en nuevas formas de innovación y, por el momento, parece que a Google le da resultado.
La mejor manera de desarrollar una mente creativa es a través de la práctica. Si quieres aplicar estos consejos en tu vida personal y profesional, elige tus actividades creativas favoritas y hazlas con regularidad. Cuanto más flexiones tu músculo creativo, más innovarás.
Las investigaciones muestran que la práctica creativa reduce el estrés y mejora la resolución de problemas así que, no esperes más y comienza a reconfigurar su cerebro con estos hábitos que te ayudarán a saber cómo fomentar la creatividad en la empresa. ¡Adelante!
Cómo fomentar la creatividad en la empresa
La psicóloga R.Keith Sawyer cuenta la historia de un equipo de científicos de la NASA que en 1990 intentaban arreglar el telescopio Hubble. Ninguno de ellos podía encontrar el modo de encajar un diminuto espejo que era necesario para corregir la distorsión de las lentes en el espacio.
La solución vino finalmente de la mano de uno de los ingenieros, Jim Crocker, al cual le llegó la inspiración sobre cómo solucionar el problema gracias a su ducha. Mientras se duchaba en un hotel de Alemania se dio cuenta que el estilo del cabezal de la ducha en Europa era distinto al de EEUU, lo que le inspiró a tener la idea de montar los espejos con brazos plegables.
Investigaciones han demostrado que las ideas que tenemos en la ducha son distintas a las que tenemos en el trabajo. Parece paradójico, pero cuanto más distraídos estamos, más creativos tendemos a ser. Mark Fenske, profesor de neurociencia y coautor de El cerebro de los ganadores, dice que a veces nos concentramos demasiado y eso nos hace perder habilidades creativas.
Las monotareas, como ducharse, no necesitan mucha concentración cognitiva así que las otras partes del cerebro pueden empezar a contribuir. Cuando la mente se distrae es más fácil y probable asociar libremente y llegar a nuevas ideas y conexiones.
La ducha, además, tiene el factor extra de ser un espacio relajante y tranquilo en el que nos sentimos seguros, convirtiéndose en un espacio perfecto para acelerar la creatividad gracias al efecto de la dopamina que generamos al sentirnos bien. Así que ya tenemos una de las formas de potenciar la creatividad; hazte con un rotulador y superficie resistentes al agua y anota las ocurrencias que tengas en la ducha, porque sino se escaparan.
Todo esto puede llevarse al entorno de trabajo. Cuanto mejor estés en tu vida personal, mejor podrás llevarlo a tu empleo. Según Michael Poh, la creatividad solamente podrá expresarse en un ambiente adecuado así que, para que aflore la creatividad dentro del trabajo, hay ciertas necesidades indispensables. Te las explicamos aquí. ¡Que lo disfrutes!
1# Recompensar la creatividad
No solamente deben recompensarse las muestras de creatividad, sino que esas sugerencias deben tomarse en serio para que los empleados estén motivados. De esta forma, un empleado se sentirá motivado y seguirá teniendo ideas.
Una buena forma de fomentar la creatividad en la empresa mediante las recompensas podría ser un espacio gamificado: A cada empleado se le pide que tenga una idea innovadora a la semana, y cada viernes se premia al que ha tenido la mejor idea. Es una forma de conseguir el interés y la implicación de todos los trabajadores, además de fomentar un ambiente distendido y de participación.
2# Dar oportunidades a todos los empleados
Puede ocurrir, sobre todo en las grandes empresas, que los empleados estén motivados para ser creativos pero no tengan la oportunidad de compartir sus ideas (ya sea por la jerarquía de la empresa, como por el temor personal de que su idea sea rechazada).
Una solución a esta situación sería colocar un buzón de sugerencias u otra cosa similar que garantizara la confidencialidad. Muchas de las ideas más creativas nacen de las sesiones de Brainstorming, donde un grupo debate las soluciones a un problema. Tener un canal privado de estas características puede mejorar el proceso creativo.
3# Equipos que promuevan la innovación
Otra forma de promover la creatividad y la innovación es formar grupos de personas que tengan como objetivo mejorar un aspecto del negocio. Este nuevo ambiente hará ver a los empleados que la empresa apoya la creatividad y hará que el miedo a cometer errores se diluya.
4# Apoyar la diversidad
¿Cómo pueden aparecer ideas de cambio si todo el mundo piensa de la misma manera? Los trabajadores que tengan estudios, conocimientos y experiencia similares conducirán a la empresa a tener un ambiente de trabajo totalmente homogéneo. Cuando un grupo de personas es tan uniforme hay poco espacio para las nuevas ideas.
El intercambio de ideas entre personas con diferentes conocimientos puede generar un ambiente muy positivo. A veces, un espacio demasiado serio puede entorpecer la creatividad.
Tener algo de diversión dentro del entorno laboral permite a los trabajadores estar relajados e inspirarse para generar nuevas ideas. No hace falta señalar que un ambiente de estrés o incluso de depresión en el trabajo no acompaña a la creatividad ni la innovación. Cuando no estás a gusto en el trabajo, en lo único que piensas es en que llegue el final del día.
La idea es que un humor positivo nos permite tener flexibilidad a la hora de pensar en nuevas ideas, porque ampliamos nuestras expectativas. Abrimos la mente y buscamos alternativas para los problemas.
5# La creatividad y los paseos por el parque
En 2014 científicos de Stanford pidieron a voluntarios hacer un test de creatividad estándar. Una vez acabaron el test les pidieron que fueran a dar un paseo o que caminaran por una cinta elíptica, y volviesen; al volver realizaron el test de nuevo.
Tras el paseo, el 81% de los voluntarios obtuvo resultados más altos que en el primer test. Sin embargo, los efectos más notorios se vieron en los participantes que caminaron por el exterior. Los científicos dedujeron que caminar por espacios abiertos permite que las ideas fluyan mejor. El nivel extra de sangre en movimiento permite que el cerebro estimule la creatividad, así que un truco más para generar ideas; simplemente cambia de ambiente y deja vagar tu mente.
6# Tomarse un respiro
A estas alturas ya habrás adivinado que bajar la guardia consigue que tu cerebro se relaje y se fomente la creatividad y que, por lo tanto, distraerse y relajarse es la clave para conseguir que todas tus ideas se generen y se muevan.
El momento justo antes de quedarte dormido, cuando te empiezas a quedar “grogui”, o cuando te estás despertando y todavía te encuentras entre un estado mental de sueño y algo despierto al mismo tiempo; son los momentos en los que interviene la creatividad con más fuerza, aunque a lo mejor no te des ni cuenta.
Un experimiento publicado por la BBC titulado How sleep makes your mind more creative, señala un experimento llevado a cabo con voluntarios, en el que se descubrió que aquellos que realizaban un test de creatividad a la mañana siguiente de un sueño reparador obtenían mejores resultados que los que lo habían hecho por la tarde.
El experimento ilustra que la combinación de lo que sabemos para generar nuevos conocimientos requiere tiempo, algo que no es muy difícil de imaginar. Pero lo más revelador es el poder del sueño en la construcción de asociaciones remotas; lo que nuestra mente diurna y racional ve como términos separados e inconexos, se vuelven piezas de información conectadas cuando estamos durmiendo y vagando por el mundo de los sueños.
Dormir nos proporciona un tiempo de incubación que necesitamos para recolocar nuestras ideas. Además, tal y como muestra otro estudio de la National Library of Medicine titulado Sleep inspires insight, tu subconsciente es más propenso a crear conexiones entre cosas de lo que lo es tu mente “despierta”, que las rechaza o las filtra.
Al fin y al cabo, la película Terminator, la canción “Yesterday” de los Beatles o el libro Frankenstein fueron creaciones fruto de los sueños de sus autores.
7# Trabajar solo o acompañado (dependiendo de tus preferencias)
Puede parecer por todo lo que estamos contando que la creatividad en la empresa va solo sobre esos “momentos eureka”, y aunque sí que son las pruebas más efectivas y potentes de ésta, lo cierto es que hay más.
Los creativos con más éxito y trayectoria tienen una cosa en común: sólidas rutinas en las que dedican, cada día, tiempo a su trabajo y al proceso creativo. Pablo Picasso decía: “La inspiración existe, pero debe encontrarte trabajando”. No debes preocuparte por tener malas ideas porque para tener buenas ideas has de pasar también por los malas.
Para el escritor Leo Baubauta la creatividad florece en soledad, algo que muchos más artistas argumentan. “Cuando estás tranquilo puedes escuchar tus pensamientos, entras en contacto contigo mismo más fácilmente y te concentras”.
Sin embargo, hay momentos en los que colaborar con otros también produce momentos de inspiración; puedes inspirarte con las ideas de otro, que crean conexiones en tu cerebro hacia una idea que comparte un poco de todo.
La clave está en encontrar cuál de las formas de potenciar la creatividad funciona mejor en tu caso. ¿Eres de los que tiene mucha imaginación en la ducha pero luego todo desaparece? ¿Te gusta compartir ideas con los demás para descubrir cómo evolucionan? ¿o eres más bien un lobo solitario?
8# Encontrar inspiración en otras industrias
Tu próxima idea no vendrá copiando lo que ya ha hecho un competidor, así que busca innovación en diferentes industrias y nichos.
Investiga qué empresas dominan y por qué. ¿A qué negocios eres más leal? ¿Por qué? ¿Cómo puedes transferir lo que funcionó para empresas fuera de tu industria a tu propio mercado? Quizás puedas mejorar estas ideas e inspirándote en otras industrias es una excelente manera de impulsar tu propia creatividad.
9# Utiliza la técnica de los seis sombreros para pensar
A veces solo necesitas empezar de nuevo. Olvídate de todo y comienza de nuevo con una pizarra en blanco: desglosa usando seis «sombreros para pensar» de diferentes colores.
El uso de este popular proceso podría ayudarte a ver las cosas de una manera diferente y te da la opción de ver las cosas de varias formas:
- Sombrero blanco: fijándote solo en los hechos
- Sombrero negro: dónde las cosas podrían salir mal
- Sombrero verde: buscando posibilidades, alternativas y nuevas ideas
Mirar un problema desde varias perspectivas únicas puede ser justo lo que necesitas para encontrar una solución.
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10# Observación consciente
Nuestra capacidad para crear comienza con la observación del mundo que nos rodea.
La forma en que percibimos nuestro entorno alimenta nuestra creatividad. Esto comienza con la observación consciente o con la atención y la apreciación de los detalles del entorno.
Al mejorar las habilidades de observación, aprovecharás tu energía creativa y descubrirás matices y detalles que no habías notado antes.
Esto abrirá tu mente a nuevas posibilidades y te ayudará a construir un repertorio de experiencias que pueden encender la innovación.
Ser observador significa prestar mucha atención al mundo que te rodea. Es fácil sentirse abrumado por la asombrosa cantidad de información visual que nos rodea así que empieza por centrarte en las áreas en las que quieras realizar mejoras.
El mundo está lleno de patrones y conexiones interesantes, intenta identificar las relaciones entre las cosas y busca cómo se forman o “encajan” juntas y cómo las personas y las cosas se afectan unas a otras.
Estas conexiones pueden ser el combustible para activar las ideas y activar tu proceso creativo.
11# Incorpora el «Design Thinkinng» en el proceso creativo
El Design Thinking es un enfoque práctico y creativo para la resolución de problemas.
Debido a que el Design Thinking se centra en los seres humanos y en la comprensión de las necesidades de las personas y luego ofrece soluciones eficaces para satisfacer esas necesidades, se puede aplicar a casi cualquier campo.
El proceso del Design Thinking consta de 5 etapas:
- Empatizar
- Definir
- Idear
- Prototipar
- Probar
Combina tanto la creatividad como las habilidades de pensamiento crítico. Esto hace que, por ejemplo, los diseñadores generen muchas ideas y las hagan prototipos, para que se sientan cómodos ante posibles fracasos.
Este tipo de pensamiento te obliga a mantener la mente abierta, a probar muchas ideas desde el principio, para que no te dediques demasiado a una sola. El proceso aprovecha la creatividad a través de la indagación y es, en esencial, el sistema perfecto para resolver problemas.
12# Crear un portafolio creativo
Este es nuestro último consejo sobre cómo fomentar la creatividad. Reflexiona sobre lo que te inspira a ser tu mejor yo creativo, ¿qué te ayuda a aprovechar tus pensamientos e ideas innovadores? ¿Hay ciertos blogs, libros o vídeos que modifiquen su forma de pensar y estimulen ideas? ¿Hay actividades que siempre parecen relajar tu mente y ayudarte a ver las cosas de una manera poco convencional como escribir un diario, meditar o salir a correr?
Crea un portafolio de cosas que te ayuden a aprovechar la energía creativa y pensamiento original. Si te gusta dibujar, intenta tener un cuaderno de dibujo o un libro de garabatos. Si te gusta escribir, un bloc de notas para anotar los pensamientos perdidos.
¿Te ha gustado este post sobre cómo fomentar la creatividad? Sea como sea, si la creatividad no viene a ti, ve tu a ella con estos pequeños consejos que te hemos dado. Sal a pasear, fomenta el Design Thinking, escucha a tus compañeros de trabajo, utiliza el brainstorming y recuerda siempre que debes dejar a tu mente fluir y fantasear de vez en cuando.
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